El pasado día 25 de Septiembre se llevó a cabo en el XVIII Congreso Nacional de Psiquiatría en Santiago de Compostela, el taller formativo denominado “La atención a la urgencia psiquiátrica: diferentes puntos de vista”.

Dicha actividad fue coordinada por el Dr. José Ángel Alcalá Partera, psiquiatra de la UGC de Salud Mental del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba y tenía la intención de reflejar el estado de la cuestión actual en este campo, prestando especial interés sobre el tratamiento coordinado entre médicos especialistas y generalistas.

Contó con la participación del Dr. Juan Luis Prados Ojeda, psiquiatra de la Unidad de Hospitalización de la UGC de Salud Mental del Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba y presidente de la Sociedad Española de Urgencias Psiquiátricas. El Dr. Prados Ojeda realizó una intervención centrada en las posibilidades de mejora en la formación, tanto en contenidos teóricos como prácticos, que permitan adquirir una adecuada competencia profesional en la atención psiquiátrica de urgencias. Además analizó las últimas estadísticas cada vez más preocupantes sobre casos de suicidios consumados y recordó las responsabilidades legales del médico en la práctica clínica diaria ante un intento de autolisis.

También intervino el Dr. Francisco Javier Fonseca del Pozo, vicepresidente de SEDUP y médico de familia del dispositivo de cuidados críticos y urgencias en Montoro (Córdoba). El Dr. Fonseca del Pozo centró su intervención en la detección de causas orgánicas y psiquiátricas de agitación, pasos a seguir para una adecuada contención verbal y la detección de signos inminentes de posible conducta violenta del paciente en consulta. Además explicó los diferentes protocolos de actuación ante una urgencia psiquiátrica en el medio extrahospitalario.

El taller contó con gran participación de médicos adjuntos y residentes de psiquiatría, que mostraron interés por todos los aspectos expuestos.

En el debate final, el Dr. Alcalá Partera reflexionó sobre el desgaste emocional que supone la atención al paciente con riesgo autolítico. También pidió opinión al resto de los ponentes, en relación a las necesidades formativas de personal no sanitario, como las fuerzas de orden público, de cara a una adecuada intervención en situaciones de crisis en las que se sospeche la presencia de enfermedad mental. Además les preguntó sobre su visión en el trato que en la actualidad los medios de comunicación están dando a las noticias relacionadas con sucesos ocurridos en personas con antecedentes de consultas previas en salud mental.